Desarrolla visión empresarial

La visión empresarial te permite ofrecer asesoría estratégica que haga avanzar los objetivos de la empresa. También te ayuda a comunicarte de forma eficaz con las partes interesadas de tu empresa. 

1. Reconoce que colaboras con la empresa:

• La percepción y las expectativas de lo que hacen los abogados han cambiado. Los buenos abogados internos son ahora algo más que asesores jurídicos. Son colaboradores de la empresa con conocimientos jurídicos.
• Demuestra tu valor. Sé la persona de la sala que se convierta en un asesor de negocios con una especialidad jurídica. Presenta tus conclusiones y consejos de forma que muestren claramente tu valor añadido. Esto te ayudará a sentarte en la mesa de los ejecutivos.
• Cuando orientes a tus colegas, asegúrate de que tu comunicación refleje que tu objetivo es hacer avanzar la estrategia de la empresa y que has tenido en cuenta sus prioridades, en relación con el asunto concreto y las implicaciones prácticas, comerciales y logísticas de la opción u opciones que recomiendes. 

2. Conoce y habla el lenguaje de la empresa:

• Entiende las métricas que valora la empresa. Los siguientes conceptos deben formar parte del vocabulario del abogado interno:
  • KPI (indicadores clave de rendimiento)  
  • ROE (rentabilidad de los fondos propios)  
  • ROI (retorno de inversión)
  • Gearing (capacidad de apalancamiento)
  • Rentabilidad total para el accionista
  • Capital circulante
  • Costo de las ventas
• Familiarízate con la terminología relacionada con las finanzas y los negocios y utilízala para apoyar tus discusiones con los equipos de dirección. Desarrolla tu familiaridad con los conceptos empresariales y financieros con la formación empresarial específica para abogados internos, como los programas Mini-MBA de la ACC en Estados Unidos y en la región EMEA.
• Tienes que saber qué preguntas debes formular al equipo financiero para prevenir el riesgo de desajustes. Los abogados encargados de redactar o revisar contratos deben tener un nivel adecuado de conocimientos financieros y contables, a fin de articular los principios financieros e incorporarlos con precisión en los contratos. 

3. Demuestra que eres un líder que sigue aprendiendo del negocio:

• Demuestra que estás familiarizado con la evolución de la propuesta de valor de tu empresa. Por ejemplo:
  • Asiste a reuniones de ventas,
  • Comprende la dinámica del producto y del cliente,
  • Visita las instalaciones de producción.
• Contribuye identificando nuevas oportunidades de negocio.
• Desarrolla habilidades de gestión y liderazgo y aprende a desarrollar un trabajo en equipo eficaz, la toma de decisiones y la creación de consenso. 

4. Avanza en el uso de la tecnología y la innovación:

• Utiliza la tecnología para fomentar la productividad y ahorrar tiempo en tareas repetitivas de escaso valor (como los acuerdos rutinarios de confidencialidad) y liberar tiempo para centrarse en proyectos de alto valor, cuestiones complejas, desarrollo y estrategia empresarial, gestión y habilidades "blandas" críticas.
• Comprende las capacidades de la inteligencia artificial para potencialmente impulsar la eficiencia en los procesos jurídicos.
• Incorporar herramientas de colaboración en tiempo real que puedan integrarse en muchas plataformas digitales. Céntrate en sistemas que permitan contribución de múltiples departamentos, que ayuden a rastrear documentos y/o que eliminen la necesidad de docenas de correos electrónicos.
• Adopta nuevas tecnologías y sé uno de los primeros en adoptarlas. La gestión de la tecnología se ha convertido en una competencia laboral debido a su creciente uso en todos los ámbitos jurídicos, como la firma electrónica, los procesos de RR.HH., la gestión de contratos y procedimientos judiciales por medios electrónicos. 

5. Aumenta tu conocimiento de los datos:

• El departamento jurídico conecta a varios departamentos en relación con el uso y la gestión de datos y los riesgos asociados. Esto incluye a menudo TI, Marketing, RRHH y otras unidades.
• Los abogados internos, y los que aspiran a convertirse en directores jurídicos o CLOs, deben tener conocimientos básicos de análisis de datos y una comprensión clara de la historia de los datos de la empresa.
• Si aún no lo estás haciendo, ponte en contacto con tu departamento de TI para familiarizarte con la forma en que tu empresa gestiona los datos. 

La nueva visión que propongo es que cada abogado interno aspire a ser un socio de negocios y no sólo un abogado, que aporte información y asesoramiento empresarial y no sólo jurídico. Deberían hacer trabajo empresarial, no sólo jurídico, en beneficio de la empresa, no sólo del departamento jurídico.

Peter Connor 
en The T-Shaped Lawyer: To Thrive, Do More Business

Siempre que sea posible, ofrece opciones a tus socios comerciales con los pros y los contras de cada opción junto con el enfoque que recomiendas. Explicar tu proceso de reflexión y cómo has tenido en cuenta los riesgos y las oportunidades puede aumentar tu capacidad de influencia en los responsables de la toma de decisiones. 

Alice Givens 
Directora de Asuntos Jurídicos, Ética y Cumplimiento 
LL Flooring Holdings, Inc. 

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